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Mostrando entradas de junio, 2012

Estrellita de ojitos negros

Me encontré una estrella chiquitina y sonriente, era una tarde soleada  y aún así su luz era mayor de la que iluminaba mi día. Tenía una voz suave que inspiraba ternura, palabras torpes por su corta edad, sus ojitos negros y redondos eran solo las ventanas a un mundo imaginario, lleno de arco iris y nubes de algodón. Mucho tiempo medité sobre ti, de como la vida se alegraba al verte sonreír, sin querer,  sin intención te robaste una gran parte de mi corazón. Me emociona estar a tu lado, ser parte de ese mundo lleno de ilusión que hace volar la imaginación. La tomaré de la mano, correré a su lado, la he visto llorar cuando se apagó nuestro sol, la he visto reír por la locura de los dos, la veo en el cielo, en el firmamento brillando como ninguna otra en comparación,  me consuela saber que es parte de mi. Esta estrellita no es de oro, no es de cristal, es tan solo mi hermanita  que me sorprende por su capacida...

Con la caricia de tu sonrisa

Hoy te encontré paseando en mi mente, cortando las flores que dibujo cuando pienso en ti, presumías la sonrisa hermosa que tienes porque sabes que me enamora, que podía hacer si mis flores son tuyas, no podía pedir que las devuelvas cuando las dibujé pensando en ti, como pedirte que no me sonrojes con la caricia de tu sonrisa, si yo quisiera morir después de una vida donde tu sonrisa sea la caricia de mis buenos días y la luz de tus ojos mis estrellas de cada noche. Quisiera morir enamorado de tu boca que un día dirá que me ama, quisiera partir a reunirme contigo porque nuestro amor no termina aquí. Quisiera partir para crear los mundos que juntos dibujaremos, solos tu y yo, quisiera extender la herencia que un día de esos en los que me sentía tan solitario a Dios le pedí. Correré a tus brazos, encontraré el camino del laberinto donde está tu corazón, conquistaré tus manos con el calor de las mías, y te llevaré en mis brazos a las puertas del cielo donde nos uniremos perpetuamen...

Tus sueños

Diariamente hablaba contigo, de las cosas que por hacer, de los caminos ya recorridos, algunos tuyos, algunos eran exclusivamente míos, siempre creíste en mi, nunca me criticaste, me corregíste, eso sí, casi cada día, alimentaste mi mente, ampliaste mi visión, pusiste mi vista en el horizonte, mis manos en el trabajo, y mis pies bien pegaditos a la tierra, siempre supe que tu partida estaría llena de este grande dolor. Hoy que ando lejos, te busqué un regalo, triste fue darme cuenta que ya no estas a mi lado, es un gran vacio, es un gran legado, hoy que ando cumpliendo tus sueños que ahora son míos, solo debo aceptar que ya no estas. Que no volverás, eso es cierto, que no te fuiste, también lo es, mi único consuelo es que un día llegaré donde tu estás, te abrazaré fuerte, seguro se repetirán las lágrimas de ayer, que son las de hoy. Se que estarás felíz, y podré contarte lo lindo que ha sido vivir y cumplir tus sueños.