Ir al contenido principal

Antes de partir

Estuve pensando en tí, en los momentos de niño cuando compartimos, a veces jugamos, siempre reimos, la vida así lo decidío, hace poco te ví, estabas cansada, un poco agobiada, ayer mientras la lluvia generosa nutría las plantas pregunte por tí, con tristeza dijeron que estabas mal, no sabían si tu corazón podría aguantar, tus pulmones ya no querían respirar, seguí mi camino y quise pensar que todo estaría bien, a pesar que días antes te habías despedido de todos, eso fue lo que me dijeron, minutos después recibí la llamada, habias cerrado tus ojitos negros, habías partido al igual que la lluvia, corrí a los brazos calidos de mi madre para consolarla, juntos con la tristeza en el alma emprendimos camino a tu encuentro y a tu despedida, había algo en el aire, las personas te amaban y a pesar que estabas allí ya te extrañaban.

Te ví con tu rostro tranquilo, tus manos cruzadas, por un instante pensé que dormias con la serenidad acostumbrada, creí que pronto te levantarías y nos abrazarías, te fuiste pero seguías allí, mis deseos no fueron suficientes para verte vivir, las lágrimas brotaron abundantemente, la lluvia volvía, en familia nos abrazamos, con tristeza estamos, no queda más cada día, solo los recuerdos de toda la vida, a veces lo he sentido, si que se me acaba la vida, no totalmente, más bien he sentido que parte de ella se ha ido con mis seres queridos.

Te fuiste y aunque sigues aquí, pronto iré para decir adios, más bien hasta pronto, todos sabemos que descansas hoy, terminaste tus días de probación y sabemos que te volveremos a ver, que te volveremos a abrazar, que volveremos a reír cuando juntos nos levantemos a una vida eterna e inmortal.

Comentarios

  1. sad but sweet at the same time!
    Me identifico al cien! yo tambien perdí una tia muuy querida! :(
    But they are in a better place.. that's for sure!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

¡Por favor no griten!

Entradas populares de este blog

Declaración de Independencia

Mientras el celeste manto pierde la batalla ante las nubes cargadas de agua que se extienden infinitamente sobre mi cabeza y el cálido sol agoniza en plena oscuridad siento dentro de mí al corazón que se ha revelado y busca deshacerse de tu amor, está en cruenta lucha para abandonar las espigas de tus manos y superar al veneno de tus labios, mientras yo sofocado por los sentimientos que se encuentran sin piedad en la batalla, trato de tomar un respiro para no sucumbir ante el dominio de tu mirada. Me atacas con los recuerdos dulces que una vez construimos y me torturas con las palabras tiernas que seducian mis tímpanos que se derretían ante la vibración de tu voz, desfallecido después de tanto amor, adolorido por tanta desilusión, desesperado por la apatía de tu corazón, no quiero beber más de tu boca, no deseo aparcar más en tu silueta, no deseo ser más prisionero de la calidez de tu cuerpo ni sentir las espigas de tus manos en mi cintura. Agotado por tanto año que he dependido de tus...

Dibujaste una sonrisa

Estaba allí afanado, no creo me hayas visto, secretamente me detuve, respiré pausado, te admiré, dirigiste tu mirada hacia mi, de lejos me dibujaste una sonrisa, tomaste un suspiro y jugando con tu cabello te marchaste, la sonrisa se quedó conmigo para hacerme recordar lo que me haces sentir.